A nuestros hijos, por haberse quedado con nuestros familiares y no
haber disfrutado de sus merecidas vacaciones de verano.
A nuestra familia que sin ellos no hubiera sido posible realizar este sueño, por el sacrificio de entre otras cosas cuidar de nuestros hijos y por haberles tenido preocupados estos veintitrés días.
A nuestros compañeros por aguantarnos durante mucho, mucho, mucho....tiempo, especialmente a Paco, José Luis, Belén y Eduardo.
A nuestros amigos y aquellas personas que nos han seguido en nuestro blog, hemos notado esa compañía con vuestros comentarios.
Especial mención a Antonio Lucas y Antonio Benítez, por su ayuda técnica y a Quique Rodríguez por apoyarnos dentro de sus posibilidades.
A todas aquellas personas que nos hemos encontrado en
nuestro viaje y nos han ayudado de forma desinteresada.
Por último y no menos importante, queremos agradecer a nuestras esposas y compañeras de viajes que se hayan dejado influenciar para poder realizar esta maravillosa locura, sin ellas hubiera sido imposible.
A todos, muchas gracias,
... y hasta el próximo viaje.