9º Día. Rovaniemi (Finlandia) a Cabo Norte (Noruega) 707 kilómetros. Tiempo empleado 13 horas.
14 de Julio de 2012
Comienza el día muy temprano, a las siete en las motos, lloviendo montando las maletas, ¡mal augurio!
Salimos tan pronto por el aviso de un colega del foro de la Bmw que nos indica de que hizo esta misma ruta hace algún tiempo y las carreteras son muy malas y se tarda bastante.
Nosotros lo complicamos un poco más, con agua y viento que nos persigue continuamente.
Desde luego el día de hoy es lo más parecido a un vía crucis, que sufrimiento, empezando por las mujeres que están agotadas de tanto agua y baches en la carretera. La velocidad es muy baja por culpa de la carretera, de la lluvia y del viento.
Realizamos la parada de la comida en un camping calados completamente, los impermeables ya no valían para nada. La solución la encontramos en el cuarto de baño del camping, sorpresa, hay una sauna que funciona con monedas. Toda la ropa dentro de la sauna durante la comida (guantes, cascos, impermeables, ropa motera, todo lo que entró).
Al menos la comida fue bastante buena, los animos regular, tirando para mal, pero al menos recuperamos fuerzas, ya nos quedaba menos de la mitad del camino. Recuerdo que José Antonio me dijo que este viaje nos debía compensar en algún momento por tantos días de agua que llevabamos.
"Por fin el cartel de Cabo Norte"
Despues de cien kilometros de una carretera serpenteando la costa y unos cuantos tuneles, llegamos a Honningsvag, pueblo mas cercano a cabo norte sobre las ocho de la tarde. Calados de agua y con la lluvia como compañera nos dirigimos a un supermercado para comprar provisiones y dirigirnos al camping donde teniamos contratado tres hytte.
El planteamiento era cenar, acostarnos y ya mañana subiremos a nuestro destino "Nordkapp", al menos hemos llegado, aunque reventados.
La cabaña esta a pocos kilometros de la bola y al lado de un lago, el sitio ideal, el dueño del camping no entiende de regateos y lo pagamos algo mas caro de lo normal.
Nos duchamos y descansamos un rato, pero algo empezaba a ser extraño, por la ventana entraba claridad y cada vez mas. Nos asomamos y el milagro se habia producido, al menos para nosotros, se estaba despejando el dia a toda velocidad y el sol asomaba con fuerza, como me acordaba de las palabras de mi amigo José Antonio, la compensación había llegado y en que momento. Eran las 11 de la noche y sin pensarlo nos volvimos a poner los trajes de motero, ya sin impermeable, las botas mojadas ya no importaban.
El paisaje es impresionante, y los colores del cielo, sin nubes, increibles. Subimos los trece kilómetros emocionados y nos faltaban ojos para ver todo el paisaje que se nos presentaba. La tierra está cubierta de una hierba que me recordaba a las algas de las rocas del nuestro litoral ceutí cuando baja la marea, los lagos se superponen uno detras de otro y el olor a hierba mojada nos lleva en volandas, los renos corretean por las praderas ajenos a nosotros.
Por fin en el horizonte vemos lo que todos soñabamos con ver hace mucho tiempo, hemos llegado a CABO NORTE es dificil explicar lo que sentimos cada uno, eso se queda en el corazón de los miembros de esta aventura.
A partir de nuestra llegada todo fueron abrazos, mucha emoción y dejarnos llevar por el entusiasmo. El caos en la zona era espectacular, cientos de caravanas llevaban esperando que pararan las lluvias y con nuestra llegada este era el momento. Multitud de idiomas y razas se unían en una celebración muy especial, cada uno a su forma, algunos brindaban, otros se habían disfrazados. Por nuestra parte lo primero fue acordarnos de nuestros amigos que no pudieron venir, aunque si estuvieron de otra forma más especial.
Después, los momentos fueron inolvidables y muy intensos.
Pudimos ver incluso la aurora boreal, es increible como los malos momentos (que habían sido muchos) se habían disipado en unos pocos minutos.
Nos damos una vuelta por las instalaciones y decidimos volver mañana con nuestra bandera de Ceuta,
Un último vistazo para intentar que la retina guarde en lo más profundo este momento mágico que hemos vivido y que dificilmente se repetirá.
