22º Día. ANNECY (FRANCIA) A TARRAGONA 830 KM.
27 de Julio de 2012
Desayunamos en el hotel, preparamos las motos en el garaje y sobre las nueve y media partimos para la autovía, hoy si todo va bien llegamos a España.
Nada más entrar en la autovía la suzuki empieza a dar problemas, mal asunto, nos quedan ochocientos kilómetros de nada.
Continuamos pero a una velocidad que a veces no superaba los cien. Llega un momento que decidimos parar, ¡esto no puede seguir así!
Realizamos unas llamadas a Suzuki España para saber cual es el concesionario más cercano y nos remiten a su pagina web, una gran ayuda. Descansamos un rato y le damos vuelta a si llamamos de nuevo a una grua, al final decidimos probar otra vez y seguir.
Bueno, la suzuki parece que responde y continuamos, el descanso le ha sentado bien.
Después de muchos cientos de kilómetros de aburrida autopista, por fin, ¡VIVA ESPAÑA! Besaríamos el suelo si no fuera porque el tráfico está saturado de camiones y no conviene tentar a la suerte, con el trabajo que nos ha costado llegar hasta aquí.
Cruzamos la Junquera y nos quedamos con la boca abierta, hemos estado tan alejados de las noticias que no sabíamos nada de la plaga de incendios que han sacudido toda España, incluido el Alto Ampurdá.
Llegamos a la provincia de Gerona y decidimos parar en una estación de servicio para repostar y continuar hasta Tarragona, nos quedan 192 km, total un paseo para nosotros. Además tenemos interés en llegar temprano para poder bañarnos en la piscina del hotel que hemos visto por internet.
Terminado el repostaje nos preparamos para continuar cuando Mª José se da cuenta de que la cadena de la suzuki no está como siempre. Al salir de Annecy la cadena estaba más o menos bien, ahora era un guiñapo.
Ya no había mucho que pensar, llamamos “otra vez” a Asistencia en carretera y nos envían una grua. Esta vez no tardan tanto como en Alemania y en cuarenta minutos los teníamos allí. Decidimos que el resto del equipo siguieran para Tarragona y la suzuki esperase la grua ya que con toda seguridad el resto del viaje lo tendría que hacer en un camión de transporte.
Con mucha pena nos separamos de nuestros compañeros.
Esta vez aviso al conductor de la grua de lo peligroso de no amarrar bien la moto y el hombre toma nota y la amarra concienzudamente.
En la central de Gruas Cruz nos atienden fenomenal, nos ayudan en la gestión con la compañía de seguros e incluso con la búsqueda del hotel.
Hoy es viernes y son casi las siete, nos hacen gestiones con distintos talleres de la zona y ninguno nos coge la moto hasta la semana que viene y eso como pronto.
El mismo gerente de Gruas Cruz lo comenta con la compañía y llegamos a un acuerdo final con la aseguradora, nosotros pagamos el hotel de esta noche y ellos nos ponen dos días un coche de alquiler a nuestra disposición (nos quedan 1235 km hasta Algeciras y no es cuestión de hacerlos en un día), así como nos trasladan la moto a Ceuta.
Nos despedimos con pena de nuestra moto y un taxi enviado por el seguro nos lleva a un hotel en el aeropuerto de Gerona donde mañana recogemos el coche de alquiler. La sorpresa fue que cuando nos llevaba el taxi pasamos por la puerta de un camping y volvimos a ver a los famosos “Bandidos de Danmark”, esta vez estaban con muchos más bandidos ya que según nos comenta el taxista se han reunido más de 3000 llegados de toda Europa, menudos elementos. Cenamos en el hotel y esperamos mañana reunirnos con nuestros compañeros.
En cuanto al resto del equipo, llegamos al hotel de Tarragona sobre las ocho de la tarde y claro está, la piscina cerrada. Vaya palo, primero separarse de Eduardo y Mª.José y ahora nos quedamos sin el baño en la piscina.
Cenita española, por fin, en el hotel y a la cama. Bueno, lo mejor es que mañana nos volvemos a reunir si Dios quiere en Almería con el resto del equipo aunque lleguemos por separado.
